Ilumina, Señor,
nuestra noche y concédenos
un descanso tranquilo;
que mañana nos levantemos en tu nombre
y podamos contemplar,
con salud y gozo, el clarear del nuevo día.
Por Cristo nuestro Señor.
Amén
¿Cuál es mi pensamiento?
Yo veo a Jesús en cada ser humano.
Me digo:
este es Jesús hambriento, tengo que darle de comer.
Este es Jesús enfermo.
Este tiene lepra o gangrena; tengo que lavarle y atenderle.
Yo sirvo porque amo a Jesús.
(Madre Teresa de Calcuta)